Moctezuma Barragán le está apostando al diálogo directo con los maestros y padres de familia, actores que fueron olímpicamente ignorados por el Gobierno Federal. El también exsecretario de Gobernación y exsecretario de Desarrollo Social dijo que «es importante evitar que cada nuevo secretario de Educación llegue con una nueva idea. Necesitamos en México, educación de calidad con equidad».
En otras palabras, la Reforma Educativa tendrá que pasar primero al quirófano y revisarle específicamente el área de evaluación docente, un área que levantó mucha ámpula en el ánimo del gremio magisterial. Por cierto, el mismo presidente del SNTE, Juan Díaz de la Torre, quien tendrá que negociar con Moctezuma Barragán, dice que es bien fácil brincarse la reforma. Por lo pronto, el güero sentista anda más achicopalado que un sentenciado a muerte. Acaso algo tendrá que ver su fallida apuesta a Meade.