Tarek Abdalá, el alcahuete de Duarte, próximo huésped del resort de Pacho Viejo

Tarek Abdalá Saad FOTO: LA PRENSA

El viernes 31 de agosto se acerca y Tarek Abdalá, exsecretario de Finanzas, sabe que ya sin el fuero y sin protección de la cofradía priista podrá ser detenido en cualquier momento. La Fiscalía General del Estado se la tiene jurada y tiene motivos para estar preocupado, pues se sabe que existen pruebas contundentes que lo encaminarían directamente, y sin escalas, al penal de Pacho Viejo, resort consentido de los excolaboradores de Javier Duarte.

Al menos, si hacemos un poco de memoria, cuando el inquilino del Reclusorio Norte andaba cacheteando el pavimento por la curvilínea Xóchitl Tress, mejor conocida la viuda alegre, petición que hacia la dama, ésta era inmediatamente complacida por el exgobernador.

Desde luego que, para pagar la casa y terrenos junto con una Land Rover último modelo que Javier Duarte le regalara al motivo de su fiebre de amor, se necesitaba dinero, mucho dinero. Pero no había ningún problema, para eso estaba Tarek Abdalá, el fiel escudero financiero que manejaba las finanzas del estado de Veracruz.

Tarek está completamente embarrado de las transas de Javier Duarte, sabe que la mirada justiciera de Yunes Linares ya lo tiene cercado, sólo es cuestión de días, ya está acorralado. Y no sorprenderá a los veracruzanos que pronto sea huésped distinguido del resort Pacho Viejo. Por cierto, por ahí un tal cisne también puede terminar como totol el 25 de diciembre.

Todos los derechos reservados. Este material no puede ser publicado, reescrito o distribuido sin autorización.

Comentarios

Deja un comentario