La Procuraduría General de la República determinó no ejercer acción penal en contra de César Duarte y de quien fuera su secretario de Hacienda, Jaime Herrera Corral, por los delitos de que se le acusara en 2014 por parte del líder de Unión Ciudadana, Jaime García Chávez. En esa denuncia se hablaba de un presunto desvío de recursos del Banco Unión Progreso, por lo que los delitos que se le imputaba eran operaciones con recursos de procedencia ilícita, delito bancario y defraudación fiscal.
Esto no quiere decir que César Duarte ya esté libre de culpa y que podrá pasearse por el zócalo de la Ciudad de México. César Duarte tiene más denuncias en su contra, muchas de ellas promovidas por el gobierno de Chihuahua, presidido por Javier Corral.
El mismo Javier Corral encabezó una caravana desde Chihuahua a la Ciudad de México con la intención de presionar para que el gobierno federal pidiera la extradición de César Duarte a México para que responda por las acusaciones que se le hacen. De modo que César Duarte no la ha librado, todavía tiene muchos toros que torear.
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