Vaya usted a saber si es cierto eso que propuso Carmen Bojórquez, en primer lugar, porque la noticia sale de un portal de Ricardo Alemán, un enfermo que odia a muerte a López Obrador y sería capaz de cualquier cosa con tal de hacerlo quedar mal. Según él, Carmen Bojórquez, académica del Colegio de Sinaloa, propuso «una quema de libro de Vargas Llosa por metiche». De ser cierto es una verdadera tontería, es volver a los tiempos de la inquisición.
Pero en caso de que esto procediera, habría un problema. Para empezar los “pejezombies” que decidieran una quema de libros del Nobel peruano, deberían tener libros de Vargas Llosa, y eso se ve difícil. El perfil de los “pejezombies” no es precisamente el de lectores de libros. Si leyeran libros serían más abiertos a la crítica.
Cierto que millones de seguidores de AMLO son lectores, pero por lo mismo no quemarían libros, porque los aman. Aparte, los libros de Vargas Llosa no necesitan quemarse, los que han leído libros de este autor saben que sus obras solitas se queman entre las brasas del tedio. Algunas novelas son insufribles; para qué quemar lo que el tiempo se ocupara en convertir en cenizas.
Comentarios