La noticia que nos llegó dice que «en algunas salas del cine estará prohibido obligar a los usuarios a que compren sus diversos productos en las dulcerías del establecimiento. Además, ya no podrán impedir el ingreso de alimentos propios».
Lo malo de esta noticia es que eso sucederá en las salas de cine de Perú, gracias a que allá tienen un Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual, así como una Asociación Peruana de Consumidores y Usuarios. En México está muy difícil que eso pase, pues los intereses de las grandes corporaciones de salas de cine son más importantes que el bienestar del consumidor.