Hace tres días el alcalde de Xalapa, Hipólito Rodríguez, dijo lo siguiente sobre los empleados de confianza del ayuntamiento: «Vamos a revisar su desempeño y en aquellos casos de los servidores públicos de carrera, los retendremos y el resto, tendremos que revisar otros perfiles». Algunos pensaron que eso de revisar su desempeño iba a llevarle unas cuantas semanas al menos, pero no, al alcalde y sus administradores les bastaron unas cuantas horas para, dizque revisar el desempeño de los trabajadores de confianza, y sin esperar más pidió que se retiraran sin firmar renuncia, sin siquiera protestar.
¡Qué rápidos no! El caso es que por un lado se dice que se revisarán perfiles y desempeño y por el otro lado ya se está afilando la guadaña para segar a los empleados de confianza de los anteriores alcaldes para poder meter sus propios empleados de confianza.
Eso no se le puede reprochar; el alcalde tiene atributos para contratar a quien se le pegue la gana. Nada más que no salga con el engaño de primero reviso su desempeño y después a ojos cerrados gritar, como la Reyna de Corazones, ¡que les corten la cabeza!
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