Esos dueños no tuvieron empacho en rendirse ante el hombre en el poder; su abyección fue brutal, a tal grado que compararon a los dos últimos gobernadores como los salvadores de Veracruz. El mérito de un buen medio de comunicación está en sus trabajadores, en el equipo humano que día con día sale a encontrarse con la noticia. Paradójicamente ellos son los que reciben el peor salario, porque el dueño no comparte sus ganancias, que él cree, son bien merecidas. Es por ello que la iniciativa de la diputada Mariana Dunyaska García fue bien recibida, pues busca que la Comisión Estatal para la Atención y Protección de los Periodistas sea un organismo protector y garante de los derechos laborales del periodista.
Por supuesto, de lo que se trata es de instar, alentar y exhortar a los dueños de los medios para que mejoren las condiciones laborales de sus trabajadores. Ahí está el chiste, ¿cómo hacerle manita de puerco a los dueños de los medios para que se porten como gentes decentes, como gentes honestas? ¿Cómo hacerle para que repartan equitativamente las ganancias de su empresa?