Los tres cochinotes: Alemán, Herrera y Duarte

La situación caótica que viven a diario los veracruzanos es una radiografía de las condiciones que vive el Gobierno Federal. Veracruz ha sido víctima de tres gobernantes sin escrúpulos, los tres emanados del PRI. Antes de partir y heredar el poder al hijo predilecto de Nopaltepec, Miguel Alemán, con la ayuda de los diputados de su partido, pidió un último préstamo millonario, todo mundo lo cuestionó cuando su hijo apareció como accionista principal de una línea aérea.

Sin embargo, el santo padre de las mil corrupciones fue precisamente Fidel Herrera Beltrán. De entrada reclutó a personajes siniestros como Jorge Carvallo, Érick Lagos, Adolfo Mota y otros que vinieron a formar una cofradía de complicidades.

Sin embargo, el Tío Fide necesitaba a un peón que pudiera sacrificar, que tapara los hoyos financieros, un hombre de poca monta pero ambicioso; el elegido fue un hombre regordete con pie plano y voz de carro platanero, a él le explotó la bomba; su gula y hambre, combinada con las deudas anteriores, han provocado el caos que ahora se vive.

Hoy Veracruz es una fiel muestra de lo que pasa en muchos estados gobernados por el PRI. El gobierno de Peña Nieto naufraga, sus reformas no cuajaron en la sociedad mexicana, por eso Veracruz es fiel reflejo del futuro de la nación.