Brenda Caballero / Ayer no pude dormir ¿Porque ganó Donald Trump? No, no me quitó el sueño su triunfo. Aunque soy sincera, esperaba como muchos, que ganara Hillary Clinton ¿por qué? En primer lugar hubiera sido interesante ver gobernar una potencia como lo es Estados Unidos a una mujer, pero no por feminismo, sino porque hay mujeres muy capaces en el mundo, y ella hubiera podido ser ejemplo de ello. Recordemos a la canciller de Alemania, Ángela Merkel, considerada la dama más poderosa del mundo por sus contribuciones políticas y económicas a su país. Agregue que un poco más del 10 por ciento de los países son gobernados por mujeres.
Sin embargo, no fue así… el presidente de los Estados Unidos de Norteamérica será Donald Trump, quien durante su campaña lo vieron grosero, intransigente, lascivo, intolerante y hasta alardeó por allí que no pagaba impuestos ¿cómo podía ganar la presidencia un hombre así? Nadie daba un peso por él; incluso, en las casas de apuestas, donde la favorita era Hillary para ganar la contienda.
Pero conforme fueron votando los estadounidenses, las cosas cambiaron. Incluso, a pesar de tener acusaciones de acoso sexual, el 40 por ciento de las mujeres votó por él. Tal parece que las mujeres nunca se engancharon al discurso de Hillary y para completar el panorama los jóvenes y los latinos no salieron a votar como se esperaba. Según las estadísticas, la votación de estos sectores fue menor que con Barack Obama.
Luego entonces, después de ser considerado por muchos como toda “una fichita” ¿Por qué ganó Donald Trump? Hay muchas opiniones al respecto, entre las que se destacan el hartazgo de los estadounidenses por los políticos; sin embargo, desde mi punto de vista, mucho tuvo que ver su discurso nacionalista, el poner primero a Estados Unidos, lo que le incrementó un populismo desmedido para que los estadounidenses salieran a votar por él.
Y de verdad que no podía dormir después del resultado de ayer, y es que mi adrenalina estaba tan alta que ni sueño tenía; por tal razón prendí el televisor y me puse a ver un programa especial sobre el resultado electoral, el cual, en lugar de analizar a fondo y mostrar un panorama alentador, aterraba a la población mexicana. De inmediato, la pregunta ¿Por qué generar miedo antes de tiempo?
Se mencionó que a las siete de la mañana de ayer habría una conferencia entre los titulares del Banco de México, Agustín Carstens Carstens, y de Hacienda, José Antonio Meade Kuribreña, para hacer frente a la situación económica del país, en la cual no se definió ninguna medida a tomar, tan solo fue un informe. Definitivamente, nuestro peso se devaluó con respecto al dólar, pero no solamente en México, sino era lógico esperar el desplome de los mercados en el mundo ante la inesperada victoria del republicano. Este fenómeno se da porque los inversionistas cambian a instrumentos más seguros y menos susceptibles a eventos internacionales como los metales preciosos y divisas estables.
He de resaltar que los mercados temblaron, menos dos que abrieron con ganancias: Rusia e Israel. El primero, porque existe cierta simpatía entre Vladimir Putin y Trump, la cual se vio reflejada en la economía rusa; mientras que de Israel se ha dicho que Trump es un ferviente sionista, incluso Michael Glassner, director político nacional de su campaña y considerado el cerebro de Trump, declaró en una entrevista que el republicano tendrá una política pro-israelí, donde lo protegerá y considerará su mejor aliado. Pero ¿qué es el sionismo? Según Wikipedia, es un movimiento político internacional, que constituye una rama del fenómeno más amplio del nacionalismo moderno. También se autodefine como un movimiento de liberación nacional.
Horas después de los resultados, el ministro de Israel, Benjamin Netanyahu felicitaba al magnate considerándolo “un verdadero amigo de su país”.
Pero volviendo a México, ¿Por qué infundarnos miedo anticipado? ¿Por el muro? ¿las deportaciones? ¿El tratado de Libre Comercio? Porque si no mal recuerdo, son los puntos que pudieran afectarnos a los mexicanos… bueno, además del alza del dólar, el cual se ve reflejado en todos los precios de los bienes de consumo y servicios.
Con respecto al muro, ya tenemos uno de 700 kilómetros, así que seguramente ordenará unos 600 más; con respecto a las deportaciones, ya se pronunció que lo hará por los que tengan antecedentes criminales, de lo contrario le saldría muy caro. Y respecto al Tratado de Libre Comercio, no creo que lo elimine, tan solo haga una renegociación, que seguramente Hillary también hubiese hecho.
Luego entonces… ¿Por qué infundarnos miedo anticipado? ¿O será a otra cosa a lo que el gobierno de México tiene miedo?
Llama mi atención que mientras todos estaban espantados, él único que demostró calma fue Andrés Manuel López Obrador, quien a las 21 horas, grabó un video al que denominó “Mensaje al Pueblo de México, por el resultado de las elecciones en Estados Unidos”, en el que se dirigió a los trabajadores migrantes y sus familiares, a empresarios, inversionistas y a todos los mexicanos y expresó: “No hay motivo de preocupación por el resultado de las elecciones en Estados Unidos, no hay que olvidar que México por el esfuerzo, el sacrificio de los padres de nuestra Patria, es un país libre, independiente, soberano, no es una colonia, un protectorado, no depende de ningún gobierno extranjero, hay que tener calma y tranquilidad…”
Ante cualquier circunstancia –dijo– vamos a estar unidos y aseguró que no habrá problemas mayores porque se hará valer el derecho a la soberanía, esté quien esté en el Gobierno de los Estados Unidos y terminó con un “No hay nada que temer, Vamos adelante”.
¿La victoria de Trump le habrá dado tranquilidad? Pues recordemos que al magnate le funcionó el discurso nacionalista y hasta de odio, algo en lo que coincide con López Obrador, y que incluso en Veracruz hizo ganar al mismo Miguel Angel Yunes Linares.
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