No es comisionado… pero como si lo fuera

Comisionado
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, en Coatzacoalcos FOTO: CGCS
- en Opinión

ENRIQUE PEÑA NIETO, Presidente de la República, no envió un Comisionado en Seguridad Pública a Veracruz como ha solicitado en varias ocasiones el gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares, pero en su visita de ayer, el titular de Gobernación Miguel Ángel Osorio Chong dejó a la Secretaría de Marina como encargada de la seguridad, y pues aunque no con el nombre, a resumidas cuentas es lo mismo. Cuestiones de la política. Ayer mismo, Osorio Chong estuvo en Coatzacoalcos, encabezando junto con el gobernador Flavino Ríos Alvarado la reunión del Grupo de Coordinación de Seguridad Veracruz. Destacó que queda la Secretaría de Marina como mando y que estará a cargo de los esfuerzos locales y federales para seguridad en el Estado. Aseguró que la ciudadanía no puede estar en un enfrentamiento de discursos y posiciones, que no ayudan a construir y que se debe seguir por la ruta del entendimiento; palabras muy parecidas a la que fuentes bien enteradas nos comentaron, le dijo Osorio Chong a Javier Duarte cuando le “sugirió” que solicitara licencia al cargo. Además, dijo que el Gobierno Federal apoya y respalda al Estado de Veracruz, pero que los estados tienen que asumir acciones para que la coordinación dé buenos resultados. “Queremos que exista tranquilidad en Veracruz, seguiremos con grupos de inteligencia para continuar con la baja en diversos delitos. Nos hemos comprometido a hacer mesas de seguridad y justicia en los municipios”, aseguró. Por otra parte, dentro de las preguntas y respuestas descartó que apenas hasta este momento el Gobierno Federal esté tomando acciones, pues dijo, no es de ahora la presencia federal, sino que ya tiene tiempo, pero que el Gobierno de Veracruz no había hecho su parte.

ENRIQUE OCHOA REZA en Veracruz estuvo con los priistas como Fidel Castro, comió y se fue. ¡Dos horas y a volar!… En el hotel HB y el Salón ONIX de Xalapa, Veracruz, se llevaron a cabo dos aquelarres político priísta. Primero, una comida con actores políticos y luego un encuentro de terapia grupal con la militancia. Ochoa Reza encabezó un evento sin acarreados, solo estaban los que debían estar con alrededor de 200 invitados y con ellos Enrique Ochoa hizo la famosa catarsis que viene realizando por varios estados de la República. Los grandes ausentes a la comida fueron el Gobernador Interino, Flavino Ríos Alvarado, y el alcalde de Xalapa, Américo Zúñiga, ambos por cuestión de agenda… pero sí llegaron al postre y al posterior encuentro con la militancia. El presídium fue estilo priísta, al estilo de los caballeros de la mesa redonda donde todos son iguales (aunque no lo sean pero ellos se entienden). Un presídium muy plural con todas las corrientes priístas veracruzanas. Estuvieron con Ochoa Reza, además de los mencionados, los dos senadores Pepe Yunes, Héctor Yunes y Manuel Cavazos Lerma, Callejas y Callejitas, Erick Lagos Hernández, Carlos Aceves del Olmo (líder nacional de la CTM)… además, se pudo ver a otros como Mónica Robles, José Luis Santiago López, Carlos Vasconcelos, Carlos García Méndez, Carlos Brito, Manuel Ramos Gurrión, Juan Carlos Molina, Erika Ayala Ríos, Martha Montoya, Ranulfo Márquez. Así como los diputados federales Adolfo Mota, Jorge Carvallo, Tarek Abdalá, Marco Antonio Aguilar Yunes, y otros más. Por cierto, el color estuvo muy bueno, léalo a continuación.

ACEVES DEL OLMO Y GLADYS MERLÍN dieron notas de color en las reuniones de Ochoa Reza con priístas de Veracruz. El líder del CEN del PRI, Enrique Ochoa Reza, tuvo algunos tropiezos que originados por sus “coordinadores” de giras, pero sacó airosamente su visita a Veracruz. Para empezar tuvo problemas con la prensa, pues gran parte de ésta se sintió excluida y sacaron virulentas notas en las que destacaron ese supuesto “desplante”, cosa que no fue así, pero la percepción quedó. Posteriormente, durante el encuentro programado con la clase priísta, ésta se vació en dos horas de las quejas y los llantos que traían en las alforjas. Ochoa escuchó y tomó notas de todo y encontró un PRI veracruzano dolido, golpeado, pero que no está despedazado ni dividido, salvo por los pepistas y hectorístas, a pesar de que los dos senadores se esmeran en decir que están más unidos que nunca. Se vio bien la presencia de Flavino Ríos y de Américo Zúñiga. Amadeo firme, aunque lo zopiloteen. Por cierto, que muchos asistentes vieron la asistencia del líder nacional de la CTM, Carlos Aceves del Olmo, como una presión para empujar a su sobrino, Carlos Aceves Amezcua. No fueron pocos los priístas que se preguntaban, ¿Y al sobrino quién lo conoce? Allá ellos, si quieren matar al PRI, que lo pongan. La inmensa mayoría coincidió en que Amadeo se debe quedar pues ya falta muy poco para el inicio del proceso electoral de las municipales. Por cierto, lo que se llevó la nota del día fue el pleito que se aventaron Gladys Merlín y su hija Karla Enríquez vs los hermanos Vázquez Parissi, a quienes acusaron de no ser auténticos priistas y de traicionar al partido en este proceso pasado y de paso les echaron la culpa de la dolorosa derrota.

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