Salvador Muñoz / A todos nos queda claro que el cargo de Fiscal para Luis Ángel Bravo Contreras es por nueve años, de acuerdo a lo “dictado” por la Legislatura local, a propuesta del Gobernador del Estado… al decir “dictado”, me refiero a un miembro del campo semántico de la palabra “Dictador”. Quien en su mundo crea que el mayoriteo de votos representa democracia o justicia sólo se merece una expresión: “¡Mi vidooo!”
Para algunos, la lógica política debe obligar a Luis Ángel Bravo Contreras a presentar su renuncia ante el Gobernador Miguel Ángel Yunes Linares en cuanto éste tome su lugar en Palacio de Gobierno para que decida si la acepta o no… ¿que es un organismo autónomo al Poder Ejecutivo?, sí, pero la política obliga y sobre todo la ética, más cuando Luis Ángel Bravo se desprende de un Gobierno señalado, acusado, condenado por la corrupción, y por ende, su actuación está bajo sospecha.
II
La salida de Luis Ángel Bravo puede ser de este modo, como él, elegante, pulcra, acicalada… o vía Congreso local, donde se supone que Morena, PAN y PRD perseguirían un fin común: un Fiscal que dé certeza de que se hará justicia y no uno que la certeza sea el encubrimiento.
Sin embargo, el asunto a veces no es quitar, sino poner. ¿Se ha pensado en alguien que pudiera ocupar el lugar, en el remoto caso de que Luis Ángel dijera “bye bye”?
Hay quienes citan un nombre: Jorge Winckler Ortiz.
En este momento, la sola mención de Winckler puede ser bien aceptada por la efervescencia post-electoral y más cuando las virtudes del abogado son más que sus defectos… que no quiere decir que sus virtudes sean las que más pesen.
III
Además de ser el defensor en los casos de Maryjosé Gamboa y Daphne, Jorge Winckler Ortiz es también ubicado como el abogado de las Plazas Comerciales para que éstas puedan cobrar por estacionamiento a los clientes. ¡Ah, claro! igual es identificado como abogado de los Yunes, al menos así lo parece del alcalde de Boca del Río.
Luego entonces, la mención de Winckler como un posible Fiscal (y no por dos años) llevaría a tener un sello muy particular y tan similar como el que actualmente tiene Luis Ángel Bravo Contreras: Del Duartismo pasaríamos al Yunismo en la Fiscalía.
Para muchos, puede ser normal que si gobierna Miguel Ángel Yunes ¡haya yunistas! pero se corre un riesgo… que en aras de combatir al monstruo, te conviertas en él. Es decir, que lejos de que haya la certeza de que se aplique la justicia, se actúe con revanchismo.
IV
¡Bueno! Eso sería si Jorge Winckler Ortiz careciera de ética y no fuera profesional y más en un estado con una sociedad lastimada y ansiosa de que se imparta justicia, aunque en esos deseos a veces se corra el riesgo de que la sed de justicia convierta a la Fiscalía en un circo romano…
Por eso decimos que en este momento, la mención de Winckler como posibilidad en la Fiscalía es aplaudida por un reconocimiento social a su labor, ya sea en la defensa de Maryjosé Gamboa, en la defensa de Daphne o sí, por qué no, en la defensa de Plazas Comerciales para cobrar por estacionamiento.
Ojalá que ese reconocimiento social que recibe Jorge Winckler lo devolviera del mismo modo al equipo jurídico de la fracción legislativa del PAN en la LXIII Legislatura, que sin hacer mucho ruido, fue el verdadero promotor de la acción de inconstitucionalidad por la aprobación para usar el impuesto al 3% a la Nómina para pago de deuda, la que hace poco, la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió a favor. Es decir, la echó p’abajo a pesar del voto mayoritario…
¿Qué hizo el equipo jurídico del PAN? Apoyar en dicha área a los municipios panistas elaborando la defensa y los argumentos para combatir la decisión del Gobierno de utilizar recursos para obra pública en otra cosa, menos para lo que era.
Por supuesto, el hecho de que saliera Miguel Ángel Yunes Márquez dando tal anuncio fue por ser el primer ayuntamiento panista que recibió la notificación y ¡claro! los reflectores se los llevó el alcalde… y su abogado.
Así que si volvemos al principio, donde se espera congruencia política y ética en Luis Ángel Bravo Contreras, igual tendremos que sentarnos a esperar la misma actitud en un alcalde y en su abogado, porque en términos Juanguistas (de Juan Gabriel, que está de moda), el Fiscal y el Abogado bien podrían decir: “Te pareces tanto a mí…”
Mientras, ¡un aplauso al equipazo jurídico que tiene el PAN en el Congreso!
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