Juan David Castilla Arcos / Xalapa, Ver. El tesorero de la asociación civil Verificentros del Estado de Veracruz, Antonio Manuel López Rosas, defendió al Secretario de Medio Ambiente, Víctor Alvarado Martínez, y negó que los nuevos Verificentros sean «fraudulentos» o haya corrupción detrás de esos negocios.
«No sé si exista corrupción, no me consta, yo apenas voy a abrir mi negocio, en una semana. Falta información, por eso estamos aquí, el precio oficial de la verificación es de cinco salarios mínimos, hay que alertar a la ciudadanía, de que no debe de pagar más».
En rueda de prensa, realizada en un restaurante de Xalapa, el concesionario de un Verificentro de Coatepec aseguró que la Entidad Mexicana de Acreditación (EMA) se está encargando de certificar dichos establecimientos.
«La EMA está efectuando la certificación de los dinamómetros, estamos pasando por ese proceso, nada más que con lo que pasó en la megalópolis hay colas para poder certificarlos».
Además, indicó que los concesionarios «irregulares» son quienes han llevado a cabo diversas manifestaciones y cierres de calles en el centro de la capital del estado.
«Quienes están actuando de manera irregular son ellos, ellos sí están defraudando al automovilista, porque les están entregando un certificado que no corresponde al tipo de vehículo, ellos sólo debieran estar verificando a los vehículos que no pueden subirse al dinamómetro, pero están agarrando al dinamómetro, pero están agarrando de todo».
El quejoso acusó de «mentiroso» al concesionario de un Centro de Verificación Vehicular de Poza Rica, Eduardo Mario Casares Sort de Sans, quien ha señalado en varias ocasiones que los nuevos Verificentros violan las Normas Oficiales Mexicanas y leyes estatales.
Los concesionarios de los nuevos Verificentros invirtieron casi tres millones de pesos para la apertura de sus negocios.
«La obra civil por las exigencias que nos piden es aproximadamente de un millón de pesos, rentamos y acondicionamos el terreno, a parte el equipo que cuesta alrededor de millón y medio de pesos, porque se disparó el dólar, todos los equipos son importados, y por la concesión pagamos 50 mil pesos, un depósito que ya nos devolvieron», culminó.
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