¿Y al final qué?

Veracruz
Javier Duarte de Ochoa FOTO: WEB
- en Opinión

Jorge Flores Martínez / Todo lo que tiene un inicio por definición tiene un final, esa condición es irrenunciable en conceptos universales y con mayor razón a ideas más mundanas y vulgares como período de gobierno, sexenio o administración, que además en su propia definición se comprende claramente su misma temporalidad.

Algunos rumores nos hablan que la Casa Veracruz será donada a titulo gratuito a una organización no gubernamental que atiende a niños con problemas de comportamiento social, aunque en honor a la verdad La Casa Veracruz ha servido para atender a un niño con patologías sociales serias y ésta propuesta solo formalizaría lo que ha sido su uso los últimos seis años, la atención a personas con cleptomanía y mitomanía en grado de sociopatía extrema. Claro que su programa de recuperación por los resultados observables ha sido un completo y total fracaso. –como todo en esta administración-

Qué Duarte regale helicópteros, aviones, inmuebles y demás propiedades del Estado no evitará que los veracruzanos le obsequiemos también como regalo un auto de formal prisión, su misma obsesión por evitarlo marca su destino, nunca antes se había visto que un gobernador en sus acciones desenmascarara sus más profundos miedos, debe ser un pésimo jugador de póker, su cara delata su mano.

Lo peor del caso son los actuales legisladores que parece que no se dan cuenta que la fidelidad-prospera esta en retirada. Todos los niños de la fidelidad al ver que el barco hace agua han decidido abandonar la embarcación y procurar negociar su futuro a través de su cada día más escaso capital político –no así su capital económico- y los diputados por el contrario, están con toda la intención de empinarse aun más en los últimos coletazos de esta agonizante administración.

Que sea la actual legislatura la encargada de nombrar al titular de la fiscalía anticorrupción o del IVAI es bajo cualquier perspectiva un insulto a millones de Veracruzanos, crea un precedente extraordinariamente negativo de la idea de democracia y rendición de cuentas en Veracruz, si Peña Nieto se burlo de todos los mexicanos con Virgilio Uribe y su investigación de conflicto de intereses en relación a la casa blanca, en donde el mismo Virgilio solo lo declaró culpable de ser tan hermoso y bello, en Veracruz es otra la historia, se trata de un gobierno agonizante y sobre todo de un grupo que intentó conformar un Veracruz de ellos y para ellos, en la que el pasado 5 de junio más de la mitad de los que votamos les dijimos que estamos hartos y queremos que se larguen, no sin antes regresar lo que se robaron. Es más en el mismo PRI se confrontaron con algunos priistas –entre ellos el mismo candidato- que en su bandera tímidamente enarbolaban que el desfalco al Estado debe tener consecuencias legales.

A Miguel Angel Yunes le esperan dos años extraordinariamente complicados, la estocada mortal el 5 de junio y la bestia negándose a morir, después de todo se trata de un botín de más de 100 mil millones de pesos anuales del que han dispuesto a su antojo los últimos doce años y borrar las huellas de su descaro no son suficientes los cinco meses que les restan, vaya la eternidad es corta para cuadrar libros y cuentas, además una próxima legislatura con MoReNa será difícil, impredecible y caprichosa, serán sin duda a equivocarnos fieles representantes del señor López Obrador y aun tengo mis dudas si parte de lo acordado con AMLO era el blindaje a la fidelidad-prospera.

Reitero que serán dos años difíciles para la nueva administración porque no derrotaron a un partido político o a una vertiente política, derrotaron a un grupo de delincuentes que aferrados al botín demuestran que la política en Veracruz cayó a niveles de inmundicia y estiércol, nada los salva, no existe un resultado positivo que presumir, una obra que mostrar, un logro que festejar.

Los veracruzanos hacemos un llamado al decoro de nuestros actuales legisladores, recuerden que existen reglas mínimas de legalidad y de observancia democrática, aun están a tiempo de recordar que son representantes de los veracruzanos y no meros achichincles de la fidelidad-prospera, ya que como dije al principio, todo lo que inicia tiene un final y este gobierno tiene fecha y es el 30 de noviembre.

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