Filiberto Vargas Rodríguez / Luis Ángel Bravo se irá… aunque no quiera.
Las cuentas no salieron como lo habían calculado en el PRI. La derrota de Carla Enríquez Merlín en Cosoleacaque modificó el esquema que se había configurado para el Congreso local.
Al final, la suma de votos le da al Partido Acción Nacional 13 diputaciones por el principio de mayoría relativa, y otras 4 por representación proporcional. El PRD tendrá tres diputados de distrito y dos plurinominales. Morena logró el triunfo en 8 distritos y sumó los votos suficientes para obtener 5 diputados de representación proporcional.
La alianza que integraron el PRI, el Partido Verde, Nueva Alianza, AVE y Partido Cardenista consiguió nueve diputaciones de mayoría relativa y seis plurinominales.
Esas no eran las cuentas alegres que habían hecho en Casa Veracruz.
El Gobernador electo, Miguel Ángel Yunes Linares había anunciado0 que una vez que tome posesión retiraría de su cargo al Fiscal General del Estado, aunque después matizó su postura y advirtió: “continuará en el cargo quien cumpla la ley, quien no cumpla la ley no puede continuar en el cargo, así de claro”.
Sin embargo, la salida de Luis Ángel Bravo Contreras podría no obedecer a una petición del Jefe del Ejecutivo. Ya la diputada electa por Veracruz, la panista Maryjose Gamboa anticipó que una de sus primeras acciones tras iniciar funciones en el Congreso local será pedir juicio político contra el Fiscal, a quien acusa de haber torcido la ley para meterla a la cárcel, acusándola de homicidio.
La amenaza de la legisladora electa no preocupaba mucho, pues la suma de los votos del PAN y del PRD no alcanzan los dos tercios para retirar el cargo al Fiscal. Sin embargo, esta semana la diputada electa de Morena por Xalapa, Daniela Griego Ceballos, anunció que una de las primeras acciones que realice la bancada de su partido será la de pedir la salida del Fiscal General, lo mismo que la del auditor general del Orfis, Lorenzo Antonio Portilla Vázquez.
Con los diputados de Morena se alcanzan 35 votos, que superan los dos tercios necesarios para la remoción de estos servidores públicos.
De concretarse una alianza legislativa entre PAN, PRD y Morena, estarían en posibilidades de retirar de su cargo, además, al fiscal anticorrupción que está por nombrar el actual Congreso, y también podrían imponer al Contralor General del Estado, quien ahora requiere de aprobación legislativa por mayoría calificada.
Con este cambio en el escenario político estatal se cae el primer blindaje que construía Javier Duarte para evitar que Miguel Ángel Yunes cumpliera su amenaza de meterlo a la cárcel.
Otras medidas ya está tomando. Se sabe que esta misma semana el actual Gobernador de Veracruz estuvo en la ciudad de México y se entrevistó con un funcionario de muy alto nivel de la Secretaría de Gobernación. Uno de los temas a tratar habría sido acordar un próximo encuentro con el Presidente Enrique Peña Nieto.
La contienda no ha terminado, ni mucho menos. Cada uno de los contrincantes mueve sus fichas en el tablero político de Veracruz. El que ayer acosaba, hoy se prepara para ser perseguido. El que ayer se quejaba hoy se alista para el contraataque.
Otros velan armas para incorporarse muy pronto a la contienda.
Así es esto de la política.
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