«Madame era un espacio libre y sin discriminación, para divertirse, bailar, disfrutar de buena música, distraerse y convivir con los amigos; expresar amor a su pareja sin importar géneros; donde no te sacarían por besar o tomar de la mano a esa persona que amas o simple y sencillamente por tu aspecto, como en muchos otros sí lo hacen».
En el mensaje los administradores hablan de la calidad humana que tenían no sólo los que ahí trabajaban, sino también de los clientes: «Efectivamente, era un club donde entraban Hombres, Mujeres, Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transexuales, Travestis, Transgénero, Intersexuales y Heterosexuales…¡PERSONAS! Que sienten como tú. Donde NO entraban narcotraficantes, donde NO entraban asesinos, donde NO se vendían drogas, donde NO entraban menores de edad».
Al final del mensaje exigen justicia: «Pedimos que cumplan con su trabajo y capturen a los actores de esta tragedia, a esas personas que jalaron el gatillo y a esas personas que dieron la orden de cometer tal crimen».