Concluí mis estudios profesionales en la UPAV y voy por más: Ana Laura Reyes

Atzalán, Ver. “Soy hija de familia y gracias al apoyo de mis padres que siempre me motivaron a salir adelante es que terminé mi preparación en la Universidad Popular Autónoma de Veracruz; a pesar de que somos de campo, el esfuerzo, motivación, cariño y amor que me dieron para estudiar en esa gran casa de estudios, me permitió lograr mi meta, terminar la licenciatura de Criminología y Criminalística y voy por más”, dio a conocer Ana Laura Reyes Parra de 27 años de edad.

Comentó que cada ocho días acudía de este lugar a Tlapacoyan, Ver., a recibir sus asesorías y, “nunca falté, siempre estuve activa, tenía muchos deseos de superarme y hoy me siento satisfecha de los logros obtenidos, mismos en los que mi familia ha estado presente. Lo conseguido es también de ellos”.

Indicó que sus padres son campesinos pero desde que tiene uso de razón ha notado que trabajan para que ella y sus hermanos se preparen y tengan una alternativa que les permita  competir en igualdad de condiciones con otros profesionistas en el ámbito laboral, “tengo tres hermanos, uno mayor que yo, una hermana que se tituló hace un mes y un hermano de 12 años que también se encuentra estudiando, todos hemos avanzado educativamente gracias al apoyo de mis papás porque su deseo ha sido que nos preparemos.

Señaló que los asesores solidarios que se encargaron de su preparación cuentan con la experiencia laboral adecuada y los elementos técnicos pedagógicos que hizo posible que la asimilación fuera sencilla, además de investigar por cuenta propia aquellos temas de mayor agrado para ella.

Aseveró que la UPAV es adecuada por la oportunidad que ha dado a los veracruzanos, sobre todo a los que viven en comunidades alejadas y con pocas posibilidades económicas para abandonar su tierra hacía las grandes ciudades y prepararse.

Destacó que desea seguirse formandose para poder entregarle a la sociedad su ética profesional y ejercer de manera correcta la profesión que decidió cursar para que otros vean el ejemplo y busquen estudiar en la institución.

“Creo que lo que nosotros hagamos como profesionales puede mover los demás; a nuestros vecinos, familiares y amigos a estudiar porque muchos tienen el gusanito de formarse, y en esta universidad la oportunidad es muy grande; se puede, todo se puede alcanzar con el deseo de transformar su existencia”, concluyó.