Arturo Reyes Isidoro / Qué güeva. Luego de la frustrante experiencia del lunes pasado, ahora el domingo se dará el primer “debate” oficial (porque lo organiza el Organismo Público Local Electoral, el órgano electoral del estado), en el que, ahí sí, participarán los siete candidatos a la gubernatura del estado.
¿Cambiará algo el que esta vez intervenga Cuitláhuac García Jiménez, de Morena, el único que no estuvo en el de Coatzacoalcos? ¿Nos trae y anunciará las grandes soluciones, viables, que rescatarán al estado de la “mafia” del poder, como dice su patrón, y que nos quedaron a deber los demás? ¿Seguirá defendiendo al gobernador Javier Duarte en contra de la “mafia del poder” encabezada por Carlos Salinas de Gortari y, según su jefe El Peje López Obrador, representada en Veracruz por Miguel Ángel Yunes Linares?
¿Se colgarán ahora todos para hablar de la seguridad industrial, de los trabajadores en las grandes industrias, ante la tragedia de lo que acaba de ocurrir en Coatzacoalcos, esto es, politizarán el asunto y se proclamarán, en forma oportunista, los salvadores de las clases obrera y trabajadora después del niño ahogado, cuando ya hay víctimas mortales porque nadie se acordó de ellos antes y exigió las máximas medidas de seguridad en los complejos industriales?
¿Nos dirán ya en serio la ruta crítica que van a seguir para aclarar dónde está el dinero de la enorme deuda pública, cuántas denuncias tienen previstas contra quién o quiénes resulten responsables del peculado o desvío de recursos públicos y en qué tiempo calculan que estarán de regreso en las arcas oficiales? ¿Nos darán un nombre de un respetabilísimo veracruzano para que se haga cargo de las finanzas estatales?
¿Nos traerán ya carne maciza, esto es, nos adelantarán a quién tienen pensado llevar a la Secretaría de Seguridad Pública, es decir, el nombre de un peso pesado en materia de seguridad ya sea de la sociedad civil, de la Marina o del Ejército?
¿Ofrecerán firmar ante notario público su compromiso de que si ganan echarán de su cargo al actual Fiscal del Estado, un funcionario al que ya nadie le cree?
¿Nos dirán con cifras y fuentes de financiamiento de dónde piensan obtener el dinero para realizar las diversas obras y servicios que andan ofreciendo para tratar de obtener nuestro voto, dada la enorme deuda que heredarán y que apenas tendrán 24 meses (es un decir) para hacer el Veracruz de Disneylandia que prometen?
¿Se comprometerán a firmar un acuerdo para llevar a prisión al responsable o a los responsables de clonar facturas de constructores y alterar sus números de cuentas bancarias para simular que ya les pagaron lo que les adeudan, para investigar a manos de quién fue a parar ese dinero y de que los obligarán a que lo reintegren al tesoro público?
¿Nos traerán ya una clara respuesta de cómo y de dónde van a sacar el dinero para pagarle lo que se le debe a la Universidad Veracruzana y en qué tiempo lo harán?
Honestamente, yo espero poco o nada de este “debate”, porque ¿qué más pueden decir que no hayan dicho ya? ¿O volverán a salir de nuevo con sus descalificaciones y con su lenguaje de cantina de ya estamos hasta la madre de los políticos tradicionales, a los que critican pero a los que sin embargo se prestan a servir de patiños?
¿De qué tamaño es la magnitud de la tragedia?
Si yo tengo gripa, la familia de la Ciudad de México no se preocupará mayormente por mi estado de salud y si acaso me llamará por teléfono para preguntarme cómo me siento. Pero si yo tengo un problema serio de salud que puede poner en riesgo mi vida, e incluso casi terminal, entonces se dejarán venir todos y dejarán cualquier otro compromiso que hubieran adquirido con anticipación, porque primero es lo primero.
¿De qué tamaño es la tragedia, que información tendrán en el Gobierno Federal como para que el propio presidente Enrique Peña Nieto y el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, hayan decidido venir a ponerse al frente de la situación de emergencia que se vive en Coatzacoalcos por la explosión en la planta Clorados III? ¿Pero también el Secretario de la Defensa Nacional, General Salvador Cienfuegos Cepeda, la Procuradora General de la República, Arely Gómez González, y el Director General de Pemex, Antonio González Anaya, y el Coordinador Nacional de Protección Civil, Luis Felipe Puente Espinosa, quienes habían llegado un día antes?
No aparecen varios trabajadores, ni vivos ni muertos. Sus familiares los reclaman y sospechan que no les dicen la verdad. Lamentablemente, por experiencia sabemos que luego las autoridades tratan de ocultar información y minimizar hechos porque piensan que en cuanto más se revele el tamaño y las consecuencias de un problema más les afecta.
Ayer el drama de las familias afectadas seguía. El Gobierno Federal debe decir toda la verdad por muy dolorosa que sea y no agregar una aflicción más a los ya de por sí angustiados paisanos míos, a quienes les expreso toda mi solidaridad y de quienes a través de los míos allá estoy pendiente para apoyarlos o auxiliarlos en lo que pueda.
Puede más el dinero que la convicción
¡Vaya espectáculo el que acaba de ofrecer el diputado local (presuntamente del Partido Nueva Alianza, porque es priista hasta la médula) Juan René Chiunti Hernández, del distrito de Cosamaloapan.
Apenas el pasado 7 de abril la diputación permanente de la Legislatura le había otorgado una licencia del 8 de abril al 6 de junio para que atendiera “asuntos personales”. En realidad se iba a sumar a la campaña de Héctor Yunes Landa.
Hasta ahí todo iba bien, pero resulta que ante ello, como era normal y legal de esperarse, su suplente José Luis Herrera Alor solicitó que se le tomara la protesta de ley para asumir la representación pues los cuenqueños no podían quedar huérfanos en la mal llamada más alta representación popular del estado.
Sin embargo, Chiunti notificó ayer a la misma diputación permanente que se reintegrará a partir del 2 de mayo, ¡pues es incapaz de vivir fuera del error!, ya que no quiere perder su jugosa “dieta” que suma una cifra de seis dígitos. Digno ejemplo del “Tlacuache” Garizurieta.
Cuando le iban a tocar el bolsillo, hasta ahí se le acabó la convicción por la candidatura de “su” candidato, al que dejó esperando y chiflando en la loma, mostrándose además muy agarrado, pues luego de estar mamando por casi tres años de la ubre del Congreso local, en nada le hubiera afectado que por dos meses su suplente mojara también su pambazo y hasta le hubiera quedado agradecido. La lana es la lana.
¿Con este tipo de “convencidos” militantes de su partido y simpatizantes de su candidatura es como Yunes Landa piensa ganar?
Por otra parte, el hecho exhibió la faramalla que monta el priismo, lo mismo en el Congreso que en el Gobierno del Estado, de presuntamente dar licencia para que alguien se dedique a una tarea política “sin violar la ley”, cuando que luego siguen cobrando en la nómina oficial como si nada.
El día cuando solicitó licencia Chiunti también lo hicieron los diputados Mónica Robles Baraja, del 4 de abril al 3 de mayo; Gladys Merlín Castro, del 5 de abril al 3 de mayo; y Marcela Aguilera Landeta, del 7 de abril al 6 de junio. ¿El mes que no trabajaron las dos primeras y los dos meses la segunda, ¿se les descontaron?, ¿hubo siquiera intentos de dar posesión a sus suplentes?
¡Vaya seriedad del órgano electoral!
Es de risa aunque el asunto debiera revestir la mayor seriedad por lo importante y trascendente del tema. El Organismo Público Local Electoral (OPLE) informó oficialmente ayer que canceló un “pacto de civilidad” entre los candidatos a gobernador, porque sólo el del PRI, Héctor Yunes Landa, había decidido firmarlo.
El consejero electoral Juan Manuel Vásquez Barajas dijo que los mandaron por un tubo los demás, esto es, Cuitláhuac Jiménez García (Morena), Armando Méndez de la Luz (MC), Miguel Ángel Yunes Linares (PAN-PRD), Juan Bueno Torio (independiente), Alba Leonila Méndez Herrera (PT) y Víctor Alejandro Vázquez Cuevas (PES). Todos argumentaron que no hay condiciones para que se cumpla ningún compromiso.
Y es que la burra no era arisca. ¿Qué pretendía el tal “pacto de civilidad”? Dizque generar un ambiente de tranquilidad para que el ciudadano ejerza su voto “libremente”, para que no exista “coacción (léase compra) económica del voto” y para que se respeten las decisiones de los órganos electorales “sin que se denigre a la propia autoridad electoral”.
¡Po’s no, no señor! Casi todos los partidos, en especial el PRI acarrean votantes que van a sufragar “por su propia voluntad” (je je); los que no lo hacen es porque no tienen cómo o con qué. La compra del voto, en especial por parte de los tricolores, pero no se quedan atrás los azules, se da al por mayor; gana el que más dinero tiene para hacerlo. No se denigra a la autoridad electoral, sólo se le mienta la madre por permitir anomalías, inclinarse y trabajar por un partido y operar para que gane ya sabe quién.
Los que no aceptaron es porque no quieren prestarse más al juego y avalar acciones de ilegalidad que finalmente les afectan. Hicieron bien porque la compra del voto, el acarreo y los insultos se van a dar. ¡Fuera máscaras!
¿Se crece al castigo?
Una gráfica que nos envió ayer nuestro corresponsal en Papantla muestra que se ve que al parecer no le ha afectado mucho a Miguel Ángel Yunes Linares la campaña desatada en su contra. Encabezó un mitin muy concurrido en pleno corazón de la ciudad, en la Plaza de la Cultura Totonaca, entre la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción y el parque municipal. ¿Habrá influido para la concurrencia la agresión del candidato priista a diputado local Basilio Picazo Pérez en contra de nuestra compañera María Elena Ferral?, esto es, ¿se reflejó ahí el hartazgo popular ante el abuso del poder que persiste por parte de algunos priistas?
Comentarios