«No me amenaces, no me amenaces, si ya fue tu destino olvidar mi cariño, pues agarra tu rumbo y vete; pero no me amenaces, no me amenaces ya juega tu suerte, ahí traes la baraja pero yo tengo los ases». Así rezaba la canción de José Alfredo Jiménez uno de los más grandes compositores de la canción ranchera mexicana.
Pues al parecer la postura del titular de la Secretaría de Educación Pública cuadra perfectamente con esta canción, aunque aquí la cantaría la CNTE, ya que las amenazas son de parte de Aurelio Nuño Mayer. El novel funcionario ha declarado a diferentes medios de comunicación que ni se les ocurra a los maestros apoyar el Paro Nacional de Maestros, convocado por la Coordinadora, ya que serán expuestos a ser dados de baja, en caso de que lleguen a faltar tres días consecutivos.
El señor Nuño Mayer ha demostrado que carece de experiencia para el dialogo; tuvo problemas con los estudiantes del Poli y, ahora con sus declaraciones, sólo está echando leña seca al fuego. Los correosos miembros de la CNTE tienen 36 años de experiencia en movimientos y manifestaciones; que acaso cree que Aurelio Nuño que logrará espantar con el petate del muerto, a la CNTE.
Lo que es un hecho es que cada día que pasa se ve más lejos su postulación a la presidencia de la República. Sólo esperemos que el asunto se resuelva y que haya mesura de las dos partes, no olvidemos que finalmente los perjudicados son los niños.
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