Se levanta el telón, Javier Duarte a horas de pisar el territorio de la impunidad
La mano que mece la cuna se comienza a sentir en la extradición de Javier Duarte. A horas de ser recluido en alguna cárcel mexicana, se siente en el ambiente una sensación de impunidad absoluta. Y es que no es para menos, el pasaporte de Karime Macías Tubilla llevaba el sello de la presidencia de Peña Nieto, un sello de impunidad absoluta.
Lo que se debe de reconocer, aunque a muchos no les parezca, es que sin las denuncias del gobernador Miguel Ángel Yunes Linares, Duarte no estaría en el patíbulo. Hoy los veracruzanos, los espectadores de primera fila, seremos testigos de una obra donde la justicia mexicana será la principal característica. En esta obra habrá simulaciones, incógnitas, lágrimas, risas y, sin lugar a dudas, mucho desencanto y desilusión.
Así que si usted espera que en esta obra haya un final feliz, donde el ladrón pase muchos años en la cárcel y su bola de cómplices regresen lo que se robaron, está equivocado. Lo más seguro es que la impunidad cierre el final de esta tragicomedia duartiana.
Algunos medios, nostálgicos del duartismo, anunciaron que Juan Antonio Nemi estaba amparado, como si ese amparo lo exculpara. Ese amparo, ya lo dijimos, sólo sirve para que el señor no pase la vergüenza de ser detenido frente a sus vecinos o en la calle. Sin embargo, Juan Antonio Nemi Dib debe presentarse ante un juez de control para enterarse de qué lo denuncian.
Por supuesto que es Javier Duarte el que aparece en el mural del artista Ariosto Otero que se ubica en interior del Antiguo Palacio del Ayuntamiento, en la Ciudad de México. Vaya, el mural titulado El despertar de México está dedicado a la corrupción. Al menos eso es lo que dice el muralista, quien señala que ya es tiempo de que México despierta y que no permita que gobernadores corruptos se roben el presupuesto.
Quién conoce a una mujer mejor que otra mujer. Es por ello que nuestra colaboradora Vicky Durán nos da su opinión sobre el posible divorcio de Karime Macías y Javier Duarte.
Ya lo habíamos señalado en este espacio, algunos medios de comunicación se rigen más por los intereses políticos y económicos que por el interés social que debe guardar el periodismo. Uno de esos medios, lamentablemente, es El Universal, uno de los medios de mayor seguimiento. Un ejemplo de lo que decimos fue el manejo tendenciosos y manipulador que tuvo del caso Eva Cadena a unos días de las elecciones en el Estado de México.
Después de que algunos padres de familia denunciaron anomalías en la Escuela Secundaria general número 6 en Xalapa, como maltrato a los alumnos de parte de personal docente y de la directora María del Carmen Osorio Zaleta, y que los padres se vieron orillados a tomar las instalaciones de la escuela, y que además, el subdirector de secundarias generales, Enrique Reyes Reyes, la removiera para hacer una supuesta investigación de los hechos. Nuevamente reinstalan a la polémica y cuestionada directora.
Tiene razón nuestro colaborador Aurelio Contreras en preocuparse por lo que sucede en el Instituto Veracruzano de la Cultura, IVEC. En su columna Rúbrica el periodista comenta que «durante la reciente presentación de la edición de este año del evento, el actual titular del IVEC, Enrique Márquez Almazán, anunció la desaparición del programa artístico de la Feria, bajo el pueril argumento de que les redujeron los recursos federales y no hay dinero.
Hay muchas quejas por los operativos que se están llevando a cabo por parte de la Dirección de Tránsito del Estado, quienes buscan poner orden en el servicio de transporte público en la modalidad de taxi. Varios sindicatos ya se han manifestado en contra de estos operativos, se dicen cansado del acoso de las autoridades de Transporte Público y de las altas multas que deben pagar no sólo por las infracciones sino por el arrastre de la grúa.