No es lo mismo administrar, dialogar y consensar inteligentemente, a tomar casetas, ponerse capucha, marchar y lanzar arengas. No es lo mismo saber conducirse con propiedad y respetar los acuerdos, que valerse de los demás para escalar posiciones. No es lo mismo mover las caderas con calzón de leopardo al ritmo de Baltimora, que dialogar absolutamente con todos.
Según información del círculo cercano al gobernador electo, ya se tiene todo preparado para ungir como secretario de Educación al exdiputado y exmiembro del MMPV, Zenyazen Escobar García, muy a pesar de las advertencias que le han hecho llegar al gobernador electo de que ese nombramiento causará malestar entre el magisterio veracruzano, en especial al MMPV, a quien Cuitláhuac García ha subestimado.
Que no se olvide que el propio Cuitláhuac García cobró relevancia e nivel nacional cuando abanderó la causa de los maestros, ya que como senador quedó mucho a deber. Si en verdad el gobernador electo sigue empecinado en poner a su camarada frente a una oficina donde se requiere preparación, diálogo inteligente y oficio, cualidades que no tiene Escobar García, ya tendrá que ir buscando una sede alterna al kilómetro 4.5, ya que seguramente los maestros del MMPV le cobrarán la factura por su traición.
No somos profetas ni aves de mal agüero, pero si se tiene tan sólo un poco de sentido común, los maestros le harán lo mismo que le hicieron a Nueva Alianza y al PRI el primero de julio. Tarde o temprano, las facturas hay que pagarlas, es una ley en esta vida.
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