Mientras muchos mexicanos celebran que el Cruz Azul sigue de líder y los maestros en Chiapas participan en los foros de consulta ciudadana para enriquecer el Nuevo Modelo Nacional Educativo, en el país vecino parece ser que ya va quedando el Tratado de Libre Comercio entre México, Canadá y Estados Unidos.
Las profundas diferencias que había entre los equipos negociadores tenían que ver con el rubro energético y con el asunto laboral. Sin embargo, con la llegada de la gente del nuevo presidente electo a la mesa de negociaciones, estas diferencias se han ido cerrando. Mucho tiene que ver la relación amistosa que ha nacido entre el presidente norteamericano Donald Trump y Andrés Manuel López Obrador.
Tenga por seguro que, si no hubiera esa relación, difícilmente avanzarían las negociaciones. Y es que una de las preocupaciones del gobierno entrante, eran precisamente, las condiciones laborales de muchos connacionales en la frontera del país, específicamente en territorio norteamericano, donde la violación a los derechos laborales es muy común.
Pues si no pasa otra cosa, esa será la salida medianamente honrosa del presidente Peña Nieto, al reafirmar una nueva relación comercial entre nuestros vecinos del norte.
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