Una de las creencias más adoptadas durante las pasadas elecciones presidenciales fue suponer que las personas de escasos recursos y las de menos nivel escolar eran el fuerte que apoyaba la candidatura de Andrés Manuel López Obrador. Hasta se les puso un nombre, “chairos”, que vino a ser sinónimo de jodido.
Vaya sorpresa la que nos da la casa encuestadora Parametría al mostrarnos que el fuerte que apoyó el triunfo de López Obrador tiene una escolaridad de universidad o más y en menor proporción de preparatoria. La misma encuesta revela que el nivel económico de las personas que votaron por AMLO en su mayoría tiene ingresos entre 15 mil y 20 mil pesos mensuales. Sobre estos puntos hay que señalar que un 64 por ciento de los que tienen estos ingresos votaron por AMLO, un 23 por ciento por Anaya y un 8 por ciento por Meade.
En el caso del nivel de estudios un 65 por ciento de universitarios o más votaron por AMLO, un 20 por ciento por Anaya y un 7 por ciento por Meade. Esta reflexión nos ayuda a entender un fenómeno que se está revirtiendo y la necesidad que una clase media está advirtiendo de cambiar de régimen. Esperemos que en adelante la palabra “chairos” ya no se use de manera tan arbitraria.
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