Filiberto Vargas Rodríguez /
Prefacio.
Para nadie es un secreto: el gobierno de Veracruz ha fracasado de manera rotunda en su obligación de contener el avance de la plaga del gusano barrenador de ganado. *** Las consecuencias son catastróficas: sigue cerrada la frontera de Estados Unidos al ganado mexicano en pie y la producción de bovinos de Veracruz no la recibe ninguna entidad en la zona norte. *** Por lo pronto, el gobierno estatal anunció que analizará la situación de cada uno de los inspectores de ganadería, a los que se les vencen sus contratos el último día de este mes. A muchos de ellos ya no se les renovará. *** Desde el interior de la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedarpa) se advierte que la intención podría ser terminar de depurar la nómina de inspectores, pues algunos habrían sido infiltrados por el exsubsecretario del ramo, Humberto Amador. Advierten, sin embargo, que otra intención sería desplazar a todos esos inspectores que no se han prestado a las recurrentes prácticas de corrupción que son promovidas desde las oficinas centrales. *** El caso es que muchos de los inspectores serán despedidos y en su lugar llegará gente recomendada por el secretario Rodrigo Calderón; el subsecretario Carlos Jiménez Díaz, y el director de Ganadería, Rubén Rueda Rodríguez, justo los responsables de que Veracruz se haya convertido en ejemplo de una estructura fallida de control zoosanitario.
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Está por concluir el año y los días que faltan deben servir para la reflexión. Revisar cuáles metas fueron alcanzadas y cuáles casos habrá que retomar con mayor ahínco en el 2026.
Ese ejercicio lo debe realizar, incluso, la gobernadora Rocío Nahle. Se dará cuenta de que la opinión de los veracruzanos es hoy muy distinta a la que mostraron en las urnas o a la que tenían al inicio de su gestión en el gobierno estatal.
Un estudio realizado por la empresa Arias Consultores apenas este mes de diciembre apunta que 8 de cada 10 veracruzanos votaría hoy a favor de retirar del cargo a la gobernadora Rocío Nahle.
El 80.6 por ciento de los encuestados considera que Rocío Nahle debe ser removida porque “le han perdido la confianza”, mientras que el resto -19.4 por ciento- opina que debería concluir su periodo. En términos generales, su administración fue reprobada por el 76.5 por ciento de los encuestados.
La misma casa encuestadora mide la calificación de todos los gobernadores del país y en su más reciente encuesta coloca a la mandataria de Veracruz en el lugar 28 de los 32.
Una vez que se conoció esta encuesta, las plumas al servicio del gobierno estatal se apresuraron a descalificarla y sugerir que se trataba de una “encuesta contratada” con el fin de golpear a la gobernadora de Veracruz. Esa explicación, sin embargo, se cayó de manera estrepitosa, pues apenas el 21 enero de este año el gobierno de Rocío Nahle emitió un comunicado para informar que la gobernadora de Veracruz continuaba “liderando la lista de aprobación general de los 32 mandatarios mexicanos actualmente en funciones” con un sólido 53.7 por ciento de aprobación “de acuerdo a la encuesta realizada por Arias Consultores”.
El comunicado oficial apuntaba: “En un análisis global, Rocío Nahle García se consolidó como la gobernadora mejor evaluada en la mayoría de los rubros, destacando especialmente en desempeño general, salud y apoyos sociales”.
Arias Consultores no es una empresa a la que se conozca por vender sus encuestas al mejor postor. Cuando los resultados le favorecen a alguien -como se pudo ver en enero de este año- no tiene el menor empacho en destacarlo.
Esta misma empresa publicó sus mediciones de los candidatos al gobierno de Veracruz, en mayo del 2024, y apuntó que Rocío Nahle estaba a la cabeza en la preferencia del electorado de Veracruz.
Su estudio en aquella ocasión arrojó que la candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia, conformada por los partidos Morena-PT-PVEM, iba al frente de la preferencia electoral con un 54.5%, en tanto que a Pepe Yunes (PRI-PAN-PRD), sólo le acreditaba la aprobación del 23.6% de los veracruzanos.
Tampoco entonces sugirieron que se tratara de “golpeteo político”, pues las cifras les favorecían.
Pero Arias Consultores no ha sido la única empresa que ha calificado de forma negativa a Rocío Nahle. Apenas en noviembre Consulta Mitofsky publicó su propio ranking de gobernadores y ubicó a la gobernadora de Veracruz en la posición 30 entre los 32 mandatarios estatales. Esa misma casa encuestadora dio la ventaja a Rocío Nahle en los días previos a la elección del 2024.
Es tal la desesperación de sus voceros, que se han atrevido a difundir una encuesta de “México Elige” que coloca a Rocío Nahle ¡en la posición 19!, entre los 32 gobernadores, y presumen que ¡subió siete posiciones!, lo que implica que en la medición previa ocupaba la posición 26.
Rocío Nahle no está haciendo bien las cosas y en lugar de corregir sus fallas (debe tener asesores que se las señalen) pretende convencer a los veracruzanos de que “va muy bien” y de que las críticas son parte de estrategias de la oposición para desacreditarla.
Es curioso que por un lado tachen a la oposición como “inexistente”, o “paralizada”, pero recurran a ella para justificar su ineficacia.
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Epílogo.
Es una vieja práctica de políticos mañosos. Cuando pretenden tomar una medida impopular, primero la “filtran” y miden la reacción de los agraviados. Si la protesta no es muy fuerte, la aplican, pero si la reacción es muy fuerte, entonces sale el gobernador a anuncian que dicha medida no será aplicada, pues “nada se hará en contra de la voluntad de los veracruzanos”. *** Este gobierno desempolvó dicha práctica y la han usado tantas veces, que ya suena a mal chiste. Pretendieron reformar las leyes para que hubiera un solo sindicato para los empleados de gobierno, lo que atentaba contra principios fundamentales de los derechos humanos en materia laboral. Al ver que se generaba una sólida protesta de organizaciones gremiales, decidieron “congelar” la iniciativa. *** Apenas la semana pasada pretendieron “pasárselas de humo” a los empleados del sector salud, al cubrir una obligación contractual (la entrega de un bono de fin de año) mediante vales de uso exclusivo y por tiempo ilimitado en los almacenes Chedraui. *** El reclamo fue de tal nivel que tuvo que salir la propia gobernadora Rocío Nahle a aclarar que “aunque la medida se ajustaba a la ley”, ella había ordenado que se corrigiera el trámite, para que los empleados puedan disponer del recurso en efectivo y utilizarlo en lo que más les convenga. *** Parecen que quieren jugar al sistema de “ensayo y error”. Pretenden hacer valer aquella añeja máxima: “el jefe nunca se equivoca, y si se equivoca, vuelve a mandar”.
