Autoridades federales revelaron que Anallely López Hernández, delegada regional de la Secretaría del Bienestar en la microrregión 8 de Libres (Puebla), se encontraba en el mismo domicilio de Guadalajara, Jalisco, donde fue detenido Nazario Ramírez Ramírez, presunto operador del Cártel Jalisco Nueva Generación, el 15 de octubre pasado. Según la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, López Hernández estaba entre las mujeres presentes en la casa durante el cateo, aunque no fue arrestada ni imputada formalmente.
La detención de Ramírez, identificado como líder transportista de la CTM en Jalisco y responsable de extorsiones, cobro de piso y narcomenudeo en Tlajomulco de Zúñiga Jalisco y Oriental, en Puebla, incluyó el aseguramiento de dos armas cortas, municiones, un kilo de metanfetamina, 170 dosis de droga y cinco vehículos, uno blindado. López Hernández admitió conocer a Ramírez por motivos laborales, pero medios locales han documentado su relación cercana a través de fotografías compartidas en redes sociales, donde aparece junto al detenido y ostentando lujos como viajes internacionales, bolsos de marcas exclusivas y una camioneta Jeep Wrangler con placas de Jalisco, regalada presuntamente por él.
La presidenta Claudia Sheinbaum desmintió rumores de su detención por armas o drogas, calificándolos de “totalmente falsos”, y aclaró que no hay cargos en su contra. Sin embargo, el escándalo escaló: el 23 de octubre, López Hernández presentó su renuncia irrevocable al cargo, tras una reunión con la nueva secretaria estatal de Bienestar, Laura Artemisa García Chávez, en medio de presuntos vínculos sentimentales con Ramírez
