Al día siguiente, el 21 de octubre, durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo evitó emitir un juicio directo sobre el caso. «No es necesario estar comentando sobre eso, que cada quien tome su opinión», declaró, enfatizando la autonomía del Poder Legislativo. Agregó que «la Cámara de Diputados tiene suficiente criterio para decir esto es factible, esto no es factible; si se hace esto hay una sanción a cualquier diputado que esté en esta circunstancia. En fin, tienen que tener un reglamento interno».
Sheinbaum reiteró que su gobierno prioriza el trabajo «por el bien de todos» y que las instituciones competentes deben resolver posibles consecuencias, sin abusar de los métodos electrónicos post-pandemia. Por su parte, Blanco justificó su conducta como una necesidad médica para hacer ejercicio, afirmando: «Mi corazón necesita hacer ejercicio otra vez» y «si me quieren multar, pues que me multen», asumiendo responsabilidad ante posibles sanciones internas.

