Personal médico y trabajadores del Hospital General de Mexicali, Baja California, colgaron una manta en las instalaciones del nosocomio para pedir públicamente apoyo a Juan José Ponce Félix, alias “El Ruso”, presunto líder de la facción “Los Rusos” del Cártel de Sinaloa. El mensaje, escrito en letras rojas y azules, decía: «Señor Ruso, dejando en claro quién tiene el poder en Mexicali, queremos pedirle su apoyo para surtir el hospital de insumos y medicamentos, y así dejar en claro que usted no tiene nada que ver con el desvío de recursos y mal uso del erario público manejado por la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda». Esta acción surgió tras 15 días de paro laboral iniciado el 3 de septiembre, motivado por desabasto crónico de medicamentos, insumos básicos (como guantes, sondas y gasas) y problemas de inseguridad, que han afectado la atención a pacientes de urgencia.
El Hospital General de Mexicali enfrenta una grave escasez de suministros desde hace meses, pese a programas federales como “Rutas para la Salud” impulsado por el gobierno de Claudia Sheinbaum. Familiares de pacientes han protestado previamente con cartulinas similares, denunciando negligencia estatal. A pesar del paro, el personal ha continuado atendiendo emergencias, pero la falta de recursos pone en riesgo vidas.
La policía municipal de Mexicali, dirigida por Luis Felipe Chan, se enteró del incidente vía redes sociales y no reportó acciones inmediatas. No se ha confirmado respuesta de “El Ruso” ni avances en el reabastecimiento. La situación subraya desafíos sistémicos en el sector salud mexicano, donde la corrupción y el desabasto persisten pese a iniciativas federales.
