Sin embargo, no es prudente tanta exposición de los hijos, sobre todo porque las fotos a veces van a parar a personas extrañas, incluso a delincuentes que las pueden ocupar para extorsionar. Es por ello que las autoridades de seguridad recomiendan nunca publicar fotos de los hijos con el uniforme escolar y menos revelar dónde estudian ya que eso los vuelve vulnerables. Se debe evitar subir imágenes donde se vean placas del auto, direcciones, o la fachada de la casa.
Tampoco se deben compartir rutinas diarias como la hora exacta en que los niños son llevados o recogidos en el colegio. Por supuesto sería bueno configurar la privacidad de sus redes: no cualquiera debería ver nuestra vida personal.

