Los detenidos, identificados como José N., alias “El Joe”, y otros nueve presuntos cómplices (cuyos nombres completos no se han divulgado por razones de investigación), forman parte de una célula delictiva vinculada a la extorsión, tráfico de personas y delitos contra menores en la zona oriente del Estado de México. Esta banda operaba en comunidades vulnerables de Chimalhuacán y Chalco, reclutando a jóvenes para actividades ilícitas y cometiendo secuestros exprés.
La detención se logró tras un cateo en una vivienda de la colonia Santa María, donde se hallaron evidencias como ropa de la víctima, armas de fuego y dispositivos electrónicos con registros de extorsión. De acuerdo con la FGJEM, la célula está relacionada con al menos tres homicidios previos en la región, y las investigaciones apuntan a que el crimen de Dulce fue un acto de represalia contra la familia por deudas pendientes.

