Noemí, madre de Fernando, un niño de 5 años secuestrado y asesinado en Los Reyes La Paz, Estado de México, denunció amenazas de la Policía de Género municipal para que abandone el caso. Según su declaración, el 11 de agosto de 2025, durante un traslado a los juzgados de Nezahualcóyotl, policías la intimidaron para que desistiera de la investigación y cambiara su defensa legal, advirtiéndole que podría ser culpada por la muerte de su hijo o enfrentar represalias. También reportó mensajes de audio amenazantes, los cuales fueron eliminados bajo presión policial.
Con apoyo de la ONG Amor y Rabia, Noemí retomó su defensa con el abogado Alán Girón, tras ser coaccionada a aceptar un defensor del DIF Municipal.
Su equipo legal alista denuncias contra los policías por amenazas y contra autoridades municipales y de la Fiscalía mexiquense por omisiones en el caso, ligado a una deuda de mil pesos. La familia ha solicitado protección a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, sin respuesta hasta ahora. El caso ha desatado indignación por las fallas institucionales y la violencia ejercida.
