Noroña, el exporro de doble moral, pide orden y compostura a Lily Téllez

La doble moral de Gerardo Fernández Noroña ofende la inteligencia de muchos mexicanos, resulta que al senador ya se le olvidaron sus tiempos de porro revoltoso, cuando increpaba todo lo que le parecía que atentaba contra su ideología izquierdista. Y es que, al imbañable senador no le parece que la senadora panista Lily Téllez, este increpando la sesiones con un megáfono. Por ejemplo, cuando se hizo el nombramiento de Juan Antonio Ferrer como embajador de México ante la UNESCO, la senadora le gritó “Juan Antonio Ferrer, ¡corrupto!” y como si ya lo tuvieran bien estudiado, las senadoras Karina Ruiz y Malú Micher se levantaron de sus asientos para hacer una férrea defensa de su compañero.

Una paso las tijeras y otra le corto el cable del megáfono de la senadora panista. Ante esta situación, el changoleón legislativo exigió orden y compostura, algo que no era común cuando este estaba formado en las filas de la oposición.

Por esa razón, uno se pregunta que cambio el modo de pensar de Noroña, Pues sencillamente, fue el cargo y el partido. No, pues no es lo mismo, comer con manteca que con mantequilla.