Lázaro Gambino Espinoza, presidente de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje de Sinaloa, fue asesinado el domingo 15 de junio en Zapopan, Jalisco. El funcionario, vinculado al gobierno de Rubén Rocha Moya, enfrentaba señalamientos por presuntos nexos con el crimen organizado, al ser concuño de Iván Archivaldo Guzmán Salazar, líder de la facción “Los Chapitos” del Cártel de Sinaloa. Gambino Espinoza, doctor en Derecho y excolaborador de Héctor Melesio Cuén Ojeda, fue ejecutado en un ataque armado, según reportes locales.
Las autoridades de Jalisco investigan el caso, mientras que el gobierno de Sinaloa lamentó el hecho sin ofrecer mayores detalles. Este asesinato intensifica las preocupaciones sobre la infiltración del narcotráfico en la política mexicana.
Cabe destacar que, durante un periodo de creciente violencia en Sinaloa, Lázaro Gambino Espinoza apareció en una lista distribuida por el crimen organizado desde una avioneta, en la que se le acusaba de tener vínculos con un grupo en conflicto con una facción rival del Cártel de Sinaloa.