Enrique Daan Esparragoza Rosas, un mexicano de 39 años originario de Culiacán, Sinaloa, ha sido identificado por autoridades de Estados Unidos como el presunto líder de una sofisticada red de lavado de dinero al servicio del Cártel de Sinaloa, una de las organizaciones de narcotráfico más notorias y violentas del mundo, designada como Organización Terrorista Extranjera (FTO) por el gobierno estadounidense. Esparragoza Rosas permanece prófugo de la justicia, enfrentando cargos por lavado de dinero y extorsión, mientras su caso ha generado atención internacional debido a su papel clave en las finanzas del cártel.
La organización de Esparragoza Rosas operaba para clientes de alto perfil, incluyendo a “Los Chapitos” (los cuatro hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán) y la facción del Cártel de Sinaloa liderada por Ismael “El Mayo” Zambada. Controlaba Tapgas México S.A. de C.V., una empresa con sede en Culiacán utilizada como fachada para sus actividades ilícitas. Enrique Daan Esparragoza Rosas, considerado un operador financiero clave del Cártel de Sinaloa, enfrenta cargos graves por lavado de dinero y extorsión, mientras su organización ha sido parcialmente desmantelada.
Su condición de prófugo y las sanciones impuestas por EE.UU. reflejan la dificultad de capturar a líderes de alto perfil en el crimen organizado. Este caso subraya la importancia de atacar las redes financieras para debilitar a los cárteles y la necesidad de una cooperación internacional más robusta para enfrentar el narcotráfico y sus consecuencias.
