Sobre el empresario involucrado, el CEN del PAN acusó «al empresario Fernando Padilla Farfán como presunto patrocinador de la campaña ilegal de la senadora, además de ser beneficiario de múltiples contratos públicos». Jorge Triana, vocero del PAN declaró: «No se trata de aportaciones voluntarias, sino de un posible esquema de financiamiento ilegal, disfrazado de donativos en especie, que corrompe el sistema democrático y vulnera la equidad en las contiendas electorales».
Además de eso el CEN del PAN exigió al Gobierno Federal que transparente su relación con Fernando Padilla Farfán: «Queremos saber cuántos contratos ha recibido, por qué montos, con qué dependencias, y si estos recursos están siendo utilizados para financiar campañas anticipadas a través de ‘donativos’ del empresario. La ciudadanía merece respuestas claras y cuentas públicas transparentes». Y todo por una senadora a la que le dieron la mano y se tomó hasta el pie. Una senadora que por ser “amiga especial” de un poderoso, se sentía intocable.

