Las únicas palabras que Claudia Sheinbaum ha pronunciado sobre el caso Teuchitlán no fueron para lamentar la muerte de tantos jóvenes, sino para pedir que no le echaran la culpa a López Obrador por esa masacre. Ante la pretensión de la Presidencia de invisibilizar a los desaparecidos, los padres acudieron al Zócalo para hacerlos presentes. En una manifestación pacífica los padres de los desaparecidos alinearon zapatos sobre la plancha del Zócalo en representación de los cientos de zapatos que se encontraron en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán, donde el Cártel Jalisco Nueva Generación instaló un campamento de entrenamiento y dos hornos crematorios. En esa misma plancha trazaron con tiza un mapa del Rancho Izaguirrem marcando el lugar en que se encontraban los dormitorios, la cocina, los baños y los hornos crematorios.
El padre de una de las víctimas al tomar la voz declaró: «La memoria de sus vidas, es prestar nuestra indignación, por la violencia, por el horror. Pero a pesar del horror, aquí estamos. Lo que nos mueve es el amor y la esperanza, por encontrarles. No más campos de exterminio, no más violencia. Queremos a nuestras hijas, a nuestros hijos, a nuestros hermanos, a nuestros padres de regreso. Les invito a que tengamos un minuto de silencio. Que merecen todas las personas que se les ha arrebatado la vida con extrema violencia».
Indignados ante la falta de respuesta de la presidencia los manifestantes lanzaron consignas en contra de Claudia Sheinbaum a la que llamaron “Narco Presidenta”. Durante la manifestación rindieron un homenaje al colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco, que fueron los que encontraron los restos de los desaparecidos.