Si México no es un narcoestado, como dice el gobierno del presidente Trump, cómo es posible que un grupo fuertemente armado como el Cártel Jalisco Nueva Generación, pueda llegar al municipio de Apatzingán y plantarse en el monumento a Lázaro Cárdenas para lanzar consignas, no contra el gobierno, sino contra los Caballeros Templarios, el grupo rival con el que se disputan el territorio. De acuerdo con información que circula en redes, un grupo fuertemente armado del CJNG llegó al emblemático monumento a Lázaro Cárdenas, ubicado en la avenida Constitución de 1814 y la carretera Apatzingán – Pátzcuaro.
De acuerdo con información del Blog del Narco, «mientras posan frente al monumento, uno de los individuos lee un mensaje dirigido a la población de Apatzingán, anunciando su llegada para “hacer la limpia de los Templarios”. El vocero del grupo criminal detalla el avance del CJNG en la región, mencionando la toma de la comunidad de El Alcalde y sus objetivos inmediatos: San Antonio La Labor en Apatzingán, así como Antúnez y Uspero en el municipio de Parácuaro, bastiones conocidos de los Caballeros Templarios. El mensaje concluye con una advertencia a sus rivales, identificados como Tucán, Malhecho y Chucky».
Por supuesto, ni la Guardia Nacional ni el Ejército ni la policía estatal o municipal se hicieron presentes. Sabe el Estado que quien cogobierna con ellos son los grupos criminales que se mueven a sus anchas.