Según la RAE, la vergüenza es una perturbación del ánimo que se produce por la conciencia de haber cometido una falta o por haber realizado una acción humillante o deshonrosa. Pero Juan Vergel no tiene esa perturbación, no siente esa vergüenza porque el señor no siente que haya cometido alguna falta o acción deshonrosa. Y como no siente vergüenza Juan Vergel se atreve a abrir la boca para decir sandeces.
Dice Juan Vergel en una entrevista: “No hay una obra de gran tamaño, de gran inversión, que reúna inversión municipal, estatal y federal. No la tenemos en la memoria. Me parece que fue en los tiempos de Acosta Lagunes, hace ya más de 40 años que no se tiene una inversión fuerte para atender este gran rezago que existe”. Como dicen en el rancho, el señor no tiene madre. Se le olvida que él fue miembro del peor gobierno que ha tenido Xalapa, el gobierno de Hipólito Rodríguez, el exalcalde que anda por las calles de Xalapa como un pobre diablo, sin que nadie lo salude, sin que nadie se acuerde de él. Hipólito Rodríguez, Ivone Cisneros y Juan Vergel fueron formaron la santísima trinidad de la ineficacia, de la inoperancia, de la corrupción.
En un mes de trabajo la administración de Ricardo Ahued en Xalapa hizo más de los que hizo Hipólito Rodríguez en los 4 años que estuvo de alcalde. Y ahora el sinvergüenza de Juan Vergel quiere, lo mismo que Ivone Cisneros, repetir lo que no hizo Hipólito Rodríguez. Eso es tener poca vergüenza, tener poca madre.