El nombramiento de Alfredo Pérez Águila, exchofer de la gobernadora de Tlaxcala, Lorena Cuéllar Cisneros, como juez interino en un juzgado especializado en violencia de género, ha generado un intenso debate en el estado. Activistas, juristas y ciudadanos cuestionaron la decisión, señalándola como un ejemplo de favoritismo y falta de perspectiva en un tema tan delicado. Pérez Águila, afiliado a Morena desde 2023, obtuvo su cédula profesional apenas este año y carece de experiencia previa en litigación o en temas relacionados con género y derechos humanos.
Sin embargo, el pasado 5 de diciembre asumió el cargo en el recién inaugurado Juzgado Familiar Especializado en Asuntos Urgentes para Mujeres en Situación de Violencia, que opera bajo el Tribunal Superior de Justicia del Estado (TSJE). El hecho provocó una ola de indignación entre organizaciones feministas, que consideran esta decisión como una falta de respeto hacia las mujeres que enfrentan violencia.
“Este juzgado prometía ser un espacio seguro y especializado para las víctimas, pero su manejo parece estar marcado por decisiones políticas, no por méritos ni compromiso con la causa”, señaló Haydee Noya, integrante de Abandona el Miedo, colectivo feminista local. La presión social obligó al Consejo de la Judicatura a destituir a Pérez Águila en menos de dos semanas. Sin embargo, lejos de ser separado del Poder Judicial, fue reasignado como Secretario Proyectista en otra dependencia judicial, lo que alimentó aún más las críticas hacia la administración estatal y el TSJE.