El que ya no tiene que preocuparse por su seguridad dentro de la cámara de senadores, es su presidente, Gerardo Fernández Noroña, ya que, quedó de manifiesto el trabajo gorilesco de cadenera de antro de la morenista Lucia Trasviña, quien tan pronto vio que Alito Moreno increpaba al invaluable Noroña, está subió rápidamente según su cuerpo se lo permitió y se puso a repartir codazos.
Y si alguien lo duda, ahí está el vídeo donde se puede ver a la senadora morenista dándole codazos a Karla Toledo, quien fue presa de la falta de civilidad de la recién bautizada, #LadyCodazos.
Ahora resulta que los morenos tienen la piel muy delgada y que no toleran una crítica, ni que alguien los increpe. O acaso ya olvidaron que cuando estos eran oposición tomaban a casa rato la tribuna. Ni hablar, y ahora que están empoderados, que se puede esperar de ellos.