México es un país donde predomina la desinformación, sobre todo cuando esta viene de parte del gobierno en forma de medias verdades. Resulta que esta mañana, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, firmó el decreto que «devuelve a Pemex y a CFE al pueblo de México», después de que fue declarada constitucional la reforma correspondiente, y también signó el decreto en materia ferroviaria, para que el Estado opere de nuevo los trenes de pasajeros. Ambos serán publicados en el Diario Oficial de la Federación. Según la misma presidenta, señaló que, en el caso de la primera, resaltó que «la reforma es fundamental para el desarrollo nacional. Es un eje estratégico».
Indicó que con estas modificaciones constitucionales «hay espacio para la inversión privada, lo que quedará establecido con orden, con certeza, en las leyes secundarias». Claro que, la representante del ejecutivo no dijo que PEMEX es la empresa petrolera más endeudad del mundo.
Tampoco dijo que PEMEX se mantiene a flote gracias al apoyo sustancial del gobierno. Yes que, parece sorprendente, pero millones de mexicanos ignoran que la deuda de PEMEX sobrepasa los USD 100 000 millones lo que equivale al 5,6 del Producto Interno Bruto, estimado apenas para el año pasado. De modo que, de que sirve que se le regresen PEMEX al pueblo bueno, si son los mexicanos los que tendrán que pagar la deuda.