Sin embargo, hace unas semanas la despidieron de su trabajo, acusándola, sin pruebas, de haber desviado de 5 millones de pesos en el área de combustibles. Ante los reporteros Mayra Vanesa Osorio denunció: «Solicitaron por escrito mi renuncia, adjudicándome un desvío de 5 millones de pesos en el área de combustibles. Dentro de la SSP, hay unas tarjetas que tienen una clave para entrar al sistema y ellos adjudican eso, que yo desvíe 5 millones de pesos de marzo a septiembre».
A esta empelada de la SSP la despidieron para encubrir el desfalco de los 5 millones de pesos que “seguramente” se robó Ulises Rodríguez Landa y que “seguramente” fueron a parar a las arcas de Eleazar Guerrero. Por supuesto, 5 millones de pesos es nada comparado con todo lo que se robaron en la SSP y en otras dependencias estatales bajo el amparo del gobernador Cuitláhuac García. Así de esa manera piensan solventar tanto saqueo, agarrando a empleados vulnerables como “chivos expiatorios”. ¡Qué poca madre!