En el taller Libertad bajo Palabra tuvimos un breve acercamiento a la novela La vegetariana de la coreana Han Kang, recientemente galardonada con el Premio Nobel de Literatura 2024. Nuestra primera impresión fue muy positiva, su estilo directo, su voz precisa no deja duda sobre lo que está diciendo, sobre lo que quiere decir. En el principio de la novela la voz que narra es la del esposo de una mujer que, después de una pesadilla cárnica, decide hacerse vegetariana. El hombre describe a la mujer y al principio nos parece que la desprecia, que la mira con ojos humillantes.
Sin embargo, conforme avanzamos en la novela nos damos cuenta de que el hombre lo que siente es un fuerte aprecio a la mediocridad de su mujer, una mediocridad que cubre sus complejos: «Si me casé con ella fue porque, así como no parecía tener ningún atractivo especial, tampoco parecía tener ningún defecto en particular. Su manera de ser, sobria y sin ninguna traza de frescura, ingenio o elegancia, me hacía sentir a mis anchas. No hacía falta que me mostrara culto para atraer su atención ni tenía que andarme con prisas para llegar a tiempo a nuestras citas.
»Tampoco había razón para que me sintiera menos cuando me comparaba a solas con los modelos que aparecían en los catálogos de moda masculina. Ni mi barriga, que había comenzado a abultar a partir de los veintitantos, ni mis delgados brazos y piernas, que no ganaban músculo a pesar de los esfuerzos que hacía —ni siquiera mi pequeño pene, que era la causa de un secreto complejo de inferioridad—, me preocupaban lo más mínimo cuando estaba con ella». La lectura seguirá este jueves a las 16: horas en el taller Libertad bajo Palabra de la Quinta de las Rosas. Por supuesto les seguiremos pasando algunos detalles de la obra.
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