Si usted creía que en el resto del mundo no se daban cuenta de lo que hacía López Obrador, está usted equivocado. En varios países de Europa López Obrador, de ser un líder honrado y congruente, pasó a ser un aspirante a dictador, un tirano que se alió al crimen organizado para quedarse con el país. Otros europeos se dieron cuenta de cómo, a la manera de Nicolás Maduro, ha dado pasos para controlar el Poder Judicial, así como tiene controlado el Poder Legislativo. En Latinoamérica, que es nuestra vecindad más cercana, López Obrador se peleó con los gobiernos de Argentina, Ecuador, Perú, El Salvador.
En Europa quiso ignorar la autoridad del rey Felipe VI y no extraña que, siendo España parte de la Unión Europea, otros países hayan decidido ignorar también a México. La lista de invitados a la toma de posesión de Claudia Sheinbaum es muy corta; de entre esos invitados abundan los representantes y los mandatarios de países “bananeros”.
Sobre el tema señala Luis Pazos en su cuenta de X: «Para la toma de protesta de Claudia Sheinbaum, el servicio exterior mexicano, invitó a 228 Presidentes, jefes de Estado, primeros Ministros, Reinas y Reyes, de los cuales solo asistirán 16 de ellos, es decir solo el 8% aceptó la invitación. De los más de 120 jefes de Estado que se acostumbra acudan a nuestro país a una toma de posesión de un presidente en México, en esta ocasión, ante el escándalo mundial del avance de una dictadura narco socialista, nadie quiere ser parte». Así las cosas en nuestras relaciones exteriores.
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