Las imágenes en las redes sociales muestran que Acapulco está devastado. Esta vez no sólo fueron los vientos huracanados de John lo que dejó devastación, sino la gran cantidad de agua que arrojó sobre los afluentes cercanos que desbordaron ríos, los cuales alcanzaron las avenidas, calles y colonias de Acapulco, Guerrero. El municipio está tan abandonado, que la alcaldesa morenista, Abelina López, reelecta por sus acapulqueños, en lugar de pedir el apoyo del gobierno federal, mejor pidió a los sobrevivientes que apoyen con lanchas para rescatar a los que quedaron atrapados en las inundaciones.
En este momento que tanto necesitan el apoyo del gobierno federal, ¿en dónde está el presidente López Obrador? Vale mencionar que los damnificados del huracán Otis se quedaron esperando la visita del presidente López Obrador, quien después de la presión social, sólo se dio sus vueltas de lejos, en buques.
Esta vez, a pesar de que se requiere el apoyo presidencial, López Obrador se fue a despedir de sus socios en Sinaloa; y cuando decimos socios, no nos referimos a los ciudadanos que votaron por el morenista gobernador Rubén Rocha. Nos referimos a los jefes del narco, que son los que lo pusieron ahí.
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