El encuentro con los estafadores se pactó en la colonia Santa María, en el cruce de Ramón Blancarte y Santa Beatriz. Al llegar al lugar señalado, la mujer encontró un vehículo Toyota blanco. Sin saber que caía en una trampa, entregó el dinero y vio cómo los delincuentes desaparecían sin dejar rastro.
Las autoridades de Guadalajara, tras conocer lo ocurrido, han iniciado una investigación para dar con los responsables y han emitido un llamado a la población para estar alerta frente a este tipo de engaños. La mujer, aún en estado de shock, busca justicia mientras la policía redobla esfuerzos para frenar este tipo de delitos que siguen cobrando víctimas en la ciudad.