“Vengo a agradecerles su apoyo a esta reforma al Poder Judicial. Yo soy fundadora de Morena, ¡a mucho orgullo, fundadora de Morena, Morena!, y fui propuesta por el presidente de la República para ser ministra de la Suprema Corte, distinción que le agradezco en infinito y todas las resoluciones y votos que he emitido han sido a favor del pueblo: el de la electricidad, el de los derechos al agua, derecho de las mujeres, derechos de niños y niñas, siempre están sometidos a la voluntad del pueblo…”, dijo Loretta Ortiz, una ministra que con sus palabras sepulta la independencia que debe tener la justicia.
Esa es la razón, por la que hay encono y marchas a lo largo del país, así como esta ministra ha exhibido su abyección al presidente y su preferencia política, tenga por seguro que es una pequeña muestra de los vendrá si se aprueba la mal llamada Reforma al Poder judicial.
Además, ha quedado constancia que cuando no hay conocimiento ni carrera judicial, se cometen muchos errores al aplicar la justicia. Ahí esta el caso de Lenia Batres, quien se hace llamar “la ministra del pueblo”, la señora ha cometido una cantidad de pifias debido a su falta de conocimiento y por no contar con carrera judicial. Eso es lo que pasará, si es que se aprueba una reforma que privilegiara, las a mistades, recomendaciones y preferencias partidistas. Pero que se puede esperar de un presidente que se tardó 14 años en terminar una carrera universitaria.
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