Los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) acudieron de inmediato a la escena, donde encontraron a Benavidez sin vida en la sala de su hogar, rodeado de los restos de su última comida. El descubrimiento no solo estremeció por la brutalidad del hecho, sino también por el pasado oscuro de la mujer; había cumplido una condena en prisión por otro homicidio hace 12 años.
La fiscalía actuó rápidamente, y la mujer fue puesta bajo custodia mientras se desarrolla la investigación. Los vecinos, aún incrédulos, intentan asimilar lo sucedido, mientras surgen preguntas sobre los motivos reales detrás de este crimen. A pesar de que los celos y las sospechas de infidelidad se perfilan como las razones principales, las autoridades continúan buscando más pistas que arrojen luz sobre el trágico desenlace de esta historia de amor y traición.