A pesar de los esfuerzos del personal médico, la joven falleció este sábado. La fiscal Verónica Hernández informó que la investigación está en curso y que se están explorando todas las líneas de investigación, incluyendo posibles vínculos con exparejas de la víctima. La Universidad de Sotavento, donde Noriko estudiaba, expresó su profundo rechazo ante este crimen atroz y exigió justicia para su alumna.
La noticia ha generado una ola de solidaridad entre estudiantes y profesionales de la salud, quienes han unido fuerzas para demandar el esclarecimiento del caso y la implementación de medidas de seguridad para el personal médico y de enfermería. La tragedia de Noriko ha resonado en toda la comunidad, despertando un clamor generalizado por justicia y la necesidad de proteger a quienes dedican sus vidas al cuidado de los demás.