Las reacciones en redes sociales fueron inmediatas y variadas. Algunos usuarios se mostraron indignados: «Al rato que lo agarren, empieza a llorar» y «Para qué tienen carro si no pueden pagar una infracción«. Otros, en cambio, aprovecharon para criticar a los agentes: «Seguramente estaba en su auto esperando y estos puercos llegan hasta en cunclillas«. Este aparato se utiliza para inmovilizar vehículos cuyos conductores no pagan el parquímetro en ciertas zonas de la Ciudad de México.
La infracción puede costar hasta 1,085 pesos, más 312 pesos adicionales por la remoción del candado. Sin embargo, este conductor decidió desafiar estas normativas de manera extrema. Las autoridades han iniciado la búsqueda del conductor, quien no solo violó las normas de tránsito, sino que también puso en riesgo la seguridad pública con su fuga. Este incidente subraya la importancia de respetar las regulaciones viales y las posibles repercusiones de intentar evadirlas.