El haber dado prioridad a la política y dejar de lado a la pedagogía y academia, no traerá buenos dividendos. No hay que olvidar que el nuevo secretario, tendrá que hacer el recuento de los daños por los disparates y ocurrencias del gobierno anterior en materia educativa. El haber eliminado el programa de Escuelas de Tiempo Completo, y darle el control de los Libros de Texto Gratuito a personajes sin experiencia editorial y pedagógica, solo son una muestra de lo que tendrá que limpiar Mario Delgado.
Pero no solo eso, tendrá que afinar detalles del experimento pedagógico llamado Nueva Escuela Mexicana, una nueva forma de enseñar, que hasta el momento no termina de cuajar, ni en el ánimo de los padres de familia y mucho menos en el de los maestros. A ver como vea va a Mario Delgado.