Las imágenes captadas por una cámara de seguridad frente al edificio permitieron a las autoridades reaccionar rápidamente. La policía, en una búsqueda intensa, localizó un vehículo que coincidía con la descripción del utilizado en el secuestro. El conductor fue detenido y en el interior del coche se encontraron una sábana, una venda y una diadema, que podrían pertenecer a la niña.
Tras una búsqueda frenética, la menor fue encontrada amarrada de pies y manos junto a un árbol, a espaldas de su vivienda. Ante la falta de ambulancias disponibles, el Grupo Especializado de Atención a la Violencia Familiar y de Género (GEAVIG) la trasladó de inmediato a un hospital, asegurando que recibiera atención médica urgente.